La mala racha llegó a su fin. El Silva doblegó justamente en el tiempo de descuento al Ribadeo, volviendo a sumar de tres en tres. El tanto en la penúltima jugada del partido llegó tras una acción de Diego Cuesta, que cede el balón a Miguel Muñoz para que el madrileño supere la línea de gol. El central manifestó al término del partido que «fue un choque complicado como estaba previsto debido a la necesidad de puntos por parte de los dos equipos. La verdad es que se nos puso de cara con un 2-0 a la media hora y con opciones para matar el partido, pero antes del descanso nos metieron e 2-1 y a poco de empezar el segundo tiempo nos empataron. Aun así, fuimos capaces de levantarnos y gracias a nuestro trabajo tuvimos muchas ocasiones claras hasta que metimos el 3-2 y conseguimos sacar los tres puntos, que eran importantísimos».
Sobre el tanto, declaró que «siempre está feliz cuando marcas un gol y más, mucho más, cuando es el de una victoria que el equipo merecía y en el último minuto, que sabe mucho mejor a pesar del sufrimiento».
Javier Bardanca, preparador del equipo, dijo que «hemos ganado un partido importantísimo para nuestro objetivo y que nos da un plus de tranquilidad para encarar los próximos encuentros».